Cuando hablamos de un equipo de alto desempeño, estamos hablando de un elemento fundamental y diferenciador de una organización que ayuda a definir el nivel de productividad de una compañía. Este grupo de individuos tiene los objetivos claros, conoce los pasos para lograrlos, y obtiene resultados positivos y sostenibles.
En estos equipos de trabajo debe existir la confianza, la capacidad de compartir conocimiento, sumar potencial y pensar como un solo cerebro; es una fusión de talentos y habilidades que busca alcanzar resultados extraordinarios. Por lo tanto, las diferencias entre un equipo de alto rendimiento y un equipo o grupo de trabajo convencional son muchas.
Retos a los que se enfrenta un equipo de alto rendimiento
Antes de hablar sobre las características que deben poseer estos equipos, es importante identificar cuáles son los retos u obstáculos a los que se enfrentan, ya que superar estos desafíos, hace la diferencia entre un equipo tradicional y uno de alto rendimiento.
En HDM, como expertos en formación de equipos de alto rendimiento, hemos identificado cuatro principales desafíos que enfrentan todos los equipos de trabajo y donde podremos ver los diferentes problemas que impiden alcanzar un objetivo:
1. Falta de comunicación
Complica el entendimiento claro del propósito.
Impide conocer la carga de trabajo de cada miembro del equipo y en qué puede estar fallando para alcanzar el resultado deseado.
2. Definir roles y responsabilidades
No se alcanzan las metas, pues no existen responsables de actividades estratégicas.
Sin una definición de roles, ¿quién hace qué?
3. Falta de liderazgo
Complica la toma de decisiones.
Es un trigger que muchas veces propicia un ambiente de trabajo tenso o incómodo.
4. Carencia de objetivos; sin un objetivo claro, cómo sabemos:
¿Qué debemos hacer?
¿Cómo lo vamos a hacer?
Características que un Equipo de Alto Desempeño
Los miembros de un equipo de alto rendimiento no buscan sobresalir individualmente, se centran en un objetivo en común y aceptan la responsabilidad en conjunto. Conoce si perteneces a un equipo como estos con las características que te presentaremos a continuación.
Comunicación efectiva y asertiva
Una de las características más importantes, es la capacidad de compartir información, opiniones e ideas con los miembros de un equipo. Se fomenta el respeto por las ideas u opiniones, se promueve la honestidad y transparencia, pues nadie guarda nada, y todo queda sobre la mesa.
Transparencia y confianza
Una comunicación transparente permite que todos los miembros del equipo confíen en los demás, sean capaces de hablar con sinceridad de lo que no funciona y se identifiquen las causas de los problemas con mayor facilidad para establecer acuerdos. Esto permitirá que el establecimiento de roles y responsabilidades se haga de acuerdo a los perfiles, los objetivos sean reconocibles por parte de los miembros y el propósito sea interiorizado de manera natural.
Responsabilidad compartida
Los equipos de alto desempeño, deben tener una visión clara y que esté alineada con los objetivos de la organización. Además de claridad en sus roles para que cada integrante del equipo conozca los alcances y responsabilidades de su puesto.
Autonomía
Al repartir la responsabilidad de los resultados entre todos los miembros del equipo, cada integrante debe tener un nivel de autonomía para cumplir con su parte de responsabilidad. El integrante debe tener la capacidad de tomar decisiones y administrar los recursos disponibles para alcanzar su meta, y que al mismo tiempo ayude al equipo completo a cumplir con los objetivos planteados por la organización.
Propósito colectivo
El propósito colectivo es lo que impulsa a un equipo a alcanzar sus metas, ofrece los argumentos necesarios y da sustento al cambio. La definición de esta palabra es “la determinación de hacer algo”, para los equipos de trabajo es importante tener un propósito para alentar su compromiso y su prospectiva de forma conjunta.
Mejora continua
Esta característica es vital para los equipos de alto rendimiento, porque establece el criterio de cambio y adaptación. La identificación de las áreas de oportunidad y crecimiento, forma parte de los objetivos estableciendo un aprecio por los aprendizajes.
Liderazgo servicial
El último, pero no menos importante. Ser líder no significa mandar, es aquel con la capacidad de dirigir con visión, incentivar con justicia y corregir con argumentos. No es esa persona capaz de cubrir la mayor parte de necesidades dentro de un equipo, debe conocer y entender a los miembros para otorgarles las tareas acordes a sus perfiles.
Conclusión
Si tu empresa tiene una gran cantidad de equipos de alto rendimiento; destacará por su agilidad, es decir, entregas de valor en periodos cortos de tiempo, que a su vez esto se traduce en niveles más altos de satisfacción en tus clientes. ¿Necesitas ayuda para construir equipos de alto desempeño? ¿Quieres incrementar el rendimiento de tus equipos actuales?
Para que un equipo trabaje de manera coordinada y maximice su rendimiento necesita que todos sus integrantes utilicen una metodología de trabajo común, contar con un solo enfoque les permitirá optimizar sus procesos haciéndolos más eficientes.
En HDM somos TEAM BUIDLERS, contamos con diferentes experiencias que te permitirán identificar áreas de oportunidad, talleres de mejora continua para desarrollar o perfeccionar habilidades, workshops de liderazgo, etc. ¡Contáctanos, te ofrecemos la mejor solución!